¿Y cómo nos van cerrar las puertas de los centros de
recolección de firmas o voluntades a las 4 pm si la Constitución dice que el
Estado debe darme todas las facilidades para ejercer mis Derechos Políticos?
¿Y cómo es eso que no colocaron ni sábado ni domingo como días de recolección de voluntades o firmas si la Constitución dice que el Estado debe facilitarme el ejercicio de mis Derechos Políticos?
¿Y cómo es eso que no colocaron ni sábado ni domingo como días de recolección de voluntades o firmas si la Constitución dice que el Estado debe facilitarme el ejercicio de mis Derechos Políticos?
¿Y cómo es eso de que sólo va haber uno o unos pocos centros
en mi parroquia si el Estado debe darme todas las facilidades para ejercer mis Derechos Políticos?
¿Y cómo es eso que los centros de recolección de firmas o
voluntades van a estar en sitios de difícil acceso si el Estado debe darme
todas las posibilidades para ejercer mis Derechos Políticos?
¿Y cómo es eso que cada entidad federal debe completar el
20% de las voluntades si la Constitución no lo establece así?
¿Y por qué el CNE hace complicado el revocatorio cuándo es
su obligación hacerlo fácil, dado que los gobiernos de la República son de
mandatos revocables y, por tanto, lo normal, lo común debería ser revocar a cualquiera en Venezuela?
Porque los ciudadanos tenemos al Estado con sus
instituciones en contra. Porque los actuales gobernantes desconocen que la
soberanía reside en el pueblo y están obligados a someterse a ella es que
debemos movilizarnos el 26,27 y 28 de octubre a manifestar nuestra voluntad de
revocar el gobierno de Maduro y toda su ineficiencia. Porque No es sólo exigir
revocatorio, es mucho más, es luchar por la plena vigencia de la Constitución
de República Bolivariana de Venezuela.
El camino no es fácil, pero no es opción quedarnos de brazos
cruzados. No podemos dejar que se salgan con la suya quienes descaradamente
violan las leyes del país. Ir a la recolección de voluntades o firmas los días
señalados teniendo claros nuestros derechos es convertir también ese acto en
una acción de protesta en contra de los que abusan del poder y son, además, los
únicos responsables de la debacle económica y social por la que atraviesa Venezuela.
Vamos a la recolección de voluntades o firmas porque creemos
viables el revocatorio este mismo año. Pero, también, vamos para convertir ese
acto en la muestra de la determinación y voluntad de un pueblo que no se rinde
y que no esta dispuesto a que le pisoteen sus derechos. Haremos que en los
centros votación todos puedan manifestar su voluntad y superemos el 20% requerido
de acuerdo a como lo establece la Constitución.
Con la Ley en la mano tenemos que vencerlos. A los malos hay
que derrotarlos con los buenos, sino el cambio sería quitar a unos malos por
otros. Nos toco lo difícil y tenemos que asumirlo: que Venezuela supere esta
pesadilla en paz y democracia. Creo que es posible porque veo un pueblo que no
se resignará a vivir humillado y de rodillas.